A DIESTRA... Pues mire nomás qué novelón se armó con el agua: después de días enteros con las carreteras hechas rompecabezas humanos, los productores empezaron a levantar los bloqueos, pero no porque les hayan cumplido, sino porque ya entendieron que alguien tiene que seguir moviendo al estado mientras la Federación decide si honra lo pactado o se hace la desentendida. Maru Campos salió a reconocerles la causa —y con justa razón—, dejando claro que la defensa del agua se apoya, sí, pero sin quebrar al comercio ni dejar varada a media Chihuahua. El problema es que mientras unos aflojaban las cuerdas, otros se daban cuenta del engaño: la comitiva formal, acordada entre Gobierno del Estado y Gobernación, llegó puntual… para quedarse plantada, sin reunión, sin explicación y con la sensación de que en la 4T alguien juega a dos bandas. Eso encendió a los líderes campesinos, que ya hablan de nuevas movilizaciones y hasta de traiciones mayores, justo cuando en San Lázaro convocan a aprobar la Ley General de Aguas con un dictamen que, según el campo, viene maquillado pero igual de dañino; claro, Morena jura por su santa palabra que todo está atendido y que la reforma es la octava maravilla. Y entre que unos dicen misa y otros rezan distinto, lo único seguro es que la sequía de seriedad sigue peor que la del clima.

Y SINIESTRA... Dicen en los pasillos del Congreso que la ratificación unánime de Héctor Acosta como Auditor Superior dejó a más de uno con la ceja levantada, no por el resultado —que era predecible— sino por el dramón que se soltó después, porque apenas salió el humo blanco cuando Javier Corral comenzó a repartir señalamientos como si fueran volantes de campaña, acusando a Morena de encubrir y a medio mundo de “tapar” cosas que, curiosamente, él mismo dejó pendientes cuando era gobernador. Acosta no se quedó callado y le recordó, con una cortesía que dolió más que un grito, que las denuncias contra Duarte fueron impulsadas desde la Auditoría, mientras que la bancada de Morena, en voz de Cuauhtémoc Estrada, trató el asunto como quien espanta una mosca: sin darle mayor mérito. Pero el remate lo dio Alfredo Chávez, que básicamente explicó que el enojo de Corral trae más que ver con los procesos en su contra que con la ratificación del auditor. Y mientras todos se avientan indirectas y verdades a medias, Acosta sigue firme en el cargo, demostrando que en política hay críticas que hacen más ruido que efecto.

AL CENTRO... El pasado viernes el Congreso amaneció con más movimiento que cafetería en quincena, porque el Gobierno del Estado llegó muy puntualito a dejar el Paquete Económico 2026, ese mamotreto de 117 mil millones que trae de todo: desde la promesa de ponerle más dinero a la educación, seguridad y salud, hasta una bolsa histórica para el campo que, ahora sí, juran que no es de dientes para afuera. Maru Campos y Jesús Granillo aparecieron juntos, con la seguridad de quien sabe que su propuesta llega fuerte, presumieron el extra para MediChihuahua, el empujón a los municipios y hasta un puntito más al Impuesto Sobre Nómina “nomás tantito”, según dicen, porque irá directo a obra pública; ahí cada quien creerá lo que quiera. Y como buen paquete de fin de año, trae su crédito a largo plazo bajo el brazo, que unos ven como visión y otros como factura futura. Lo cierto es que comenzó el estira y afloja legislativo, y ya se sabrá quién llega a enero diciendo que fue un presupuesto responsable… y quién nomás hizo ruido para la foto.

A DIESTRA I... Pues mira, en los pasillos andan diciendo que ni el mejor guionista de telenovelas se habría aventado un capítulo tan absurdo como el del operativo en El Sauz: que la Fiscalía, el Ejército y hasta Proyectos Especiales se lanzan con todo, que encuentran armas, vehículos, droga y que los vecinos ya hasta suspiraban pensando que por fin les habían quitado la plaga… pero llega el juez de control y bolas, que la detención “no fue legal” y háganme el favor de soltar a los diez detenidos como si fueran víctimas de malentendido y no protagonistas del relajo que traían. La banda nomás se quedó viendo con cara de “¿pos qué más querían?”, mientras en los cafés de Chihuahua ya se repite la frase de rigor: cuando la justicia se pone de cabeza, no hay operativo que acomode el sentido común.

Y SINIESTRA I... Dicen los que andan pegados al PAN que la Asamblea Nacional estuvo más sabrosa que una reunión familiar después de años de pleitos, porque de pronto empezaron a desfilar Margarita Zavala, Adriana Dávila y hasta Roberto Gil, como esos parientes que un día se fueron dando portazo y hoy regresan diciendo que “ya lo pensaron bien”. Y mientras unos se hacían los sorprendidos, otros nomás levantaron ceja cuando se aprobaron las reformas: afiliación digital, candidaturas ciudadanas y un menú de “meritocracia” que, según prometen, ahora sí pondrá a cada quien en su lugar. Con todo y nuevo Consejo Nacional, la jugada se leyó clarito: el PAN está acomodando la casa, reforzando sus ligas territoriales y, de paso, abriendo espacio para viejos conocidos que regresan justo cuando empieza a oler a tiempos de definición. Porque si algo quedó claro, es que en Acción Nacional nadie se va para siempre… solo esperan el momento exacto para volver a tocar la puerta... bueno, todos menos Corral.