A DIESTRA... El show en la Permanente se puso bueno, pero no por el debate… ¡sino por la falta de él! Resulta que diputados y senadores de la oposición se arrancaron con todo para exigir que se hablara —así, sin miedo— del caso de “La Barredora” y los oscuros enredos del famoso Grupo Tabasco, pero los de Morena pusieron cara de “yo no fui” y se hicieron los mudos. El PAN, con Federico Döring a la cabeza, se fue directo al grano y desde tribuna le soltó la pedrada a Adán Augusto, que andaba ahí nomás de pasadita, como quien va al Oxxo por una coquita, nomás que en vez de refresco, lo estaban rostizando con señalamientos. Pero claro, el ex de Gobernación se tragó el coraje, no abrió la boca y prefirió quedarse sentadito, bien callado, como si no lo estuvieran acusando de encubrir a su compa el prófugo. Y pues nada, la tribuna se calentó… pero el debate, ese nunca llegó.

Y SINIESTRA... Ahora sí que “Alito” se fue con todo y sin freno: agarró su espada de cruzado y denunció ante la FGR a medio gabinete morenista, al expresidente López Obrador, a su hijo Andy, y a cuanto gobernador de la 4T encontró en el directorio, por presuntos nexos con el narco, encubrimiento, huachicol, lavado, traición a la patria y quién sabe cuántas cosas más. Dicen que no dejó títere con cabeza: que si Rocha Moya se echaba cafés con el Mayo Zambada, que si Marina del Pilar ya no puede ni cruzar a Caléxico por andar lavando, que si Andy encabeza la mafia del huachicol fiscal desde Tabasco, y hasta a Adán Augusto lo acusa de tener de compa a un prófugo buscado por la Interpol. ¡Vaya lista! Parecía guion de narcoserie, nomás que sin ficción. Y por si fuera poco, “Alito” se aventó el numerito en conferencia como quien presenta el cast del nuevo escándalo. Lo curioso es que mientras señala a todos, él trae en la espalda una solicitud de desafuero por desvío de más de 83 milloncitos. Como quien dice, “el comal le dijo a la olla”.

AL CENTRO... ¡Ah, qué cosas con don Ricardo Monreal! Primero se aventó su editorial muy filosófico en su página, cuestionando la propuesta estrella de la presidenta Sheinbaum sobre desaparecer los plurinominales, que porque no es la mejor medicina para el mal democrático —según él, hay remedios menos agresivos y con menos efectos secundarios—; pero apenas le empezaron a sonar las orejas en Palacio y ¡zas!, que se lanza al Twitter a decir que todo fue un malentendido, que él apoya la propuesta de la presidenta con toda el alma, como siempre, faltaba más. No es la primera vez que se le enfría el café a Monreal con la jefa: ya había metido al congelador la reforma al ISSSTE que Sheinbaum mandó, porque los profes estaban que echaban humo. Eso sí, el zacatecano se hace el analítico, el técnico, el institucional, pero nomás le dicen que hay línea, y da vuelta en U con la misma agilidad con la que cambia de saco. Vaya que entre los “pluris”, las listas y los recules, nos están dando más vueltas que rueda de la fortuna.

A DIESTRA I... Ahora sí que en el TEE se armó la maroma jurídica con sabor a telenovela: imagínese que un fulano, que ya se sentía con toga y mazo en el Distrito Judicial Galeana, tuvo que devolver la corona porque el IEE aplicó la de “paridad manda” y le dijo: “compa, va una mujer porque nos faltan damas en el reparto penal”. Y aunque el susodicho pataleó, impugnó y alegó que ganó en las urnas, el Tribunal le respondió con unanimidad: “ni modo, papá, la Constitución es la Constitución”. Y no fue el único que se quedó con las ganas, porque en Cuauhtémoc y Juárez también hubo quienes lloraron porque no les cuadraron los números o no les tocó la constancia, pero los magistrados les dijeron que sus impugnaciones estaban más flacas que caldo de microondas. Con eso ya van 85 dramas resueltos y todavía faltan más de 100 por destripar este jueves, así que si usted anda queriendo un asiento en el Poder Judicial, aguántese que la novela todavía no acaba.

Y SINIESTRA I... Ahora sí que Bayo Valenzuela se fue hasta San Lázaro a poner el dedo en la llaga —y con toda la razón— porque dijo clarito que en este país la corrupción ya no puede seguir siendo un chisme de sobremesa, sino un asunto serio y de a de veras. Con todo el estilo norteño que lo caracteriza, el fiscal anticorrupción de Chihuahua se plantó firme ante diputadas, diputados y hasta agentes del FBI (que nomás movían la ceja como diciendo “¡ándale!”) para decirles que urge quitarle el blindaje político a las fiscalías, homologar leyes pa’ que no se les escapen los pillos de un estado a otro, rastrear cada pesito desviado y, sobre todo, dejarse de rollos y coordinarse. Dicen que hasta Ricardo Mejía lo aplaudió con entusiasmo, mientras otros se acomodaban incómodos en la silla, no fuera a ser que los ejes que propuso Bayo les pasaran muy cerquita. ¡Y cómo no! Si el mensaje fue tan directo que más de uno salió buscando abogado.